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¿Cómo puedo ayudar a una persona con trastorno límite de la personalidad?

Mateo Villagómez
Mateo Villagómez
2025-05-11 13:09:13
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A la hora de relacionarte de manera asertiva con una persona que tiene trastorno límite de la personalidad debes aprender a reconocer los momentos en los que puede presentarse una crisis y en medio de ella no te alejes, todo lo contrario, presta un acompañamiento sin juzgar. Hacerle saber tu disponibilidad de apoyo Las personas con TLP deben tener una lista de contactos a quienes recurren en las crisis. Estas personas deben trasmitir seguridad, responder sin importar el caso y saber cómo reaccionar a las necesidades del momento. Aceptación incondicional Esto significa que las personas aceptan que tiene este desorden y que en momento de crisis no recibirá una reflexión sobre cómo debe sentirse, ni comentarios a la defensiva o en contra. Brinda comprensión, estas crisis forman parte de su trastorno y su duración no es infinita. Demuestra afecto En momentos de crisis, sin importar qué tan a la defensiva está la otra persona, la recomendación es acompañarlo sin juzgarlo y haciéndole saber que estás ahí a pesar de todo. El amor, la compañía y la empatía son herramientas a las cuales puedes recurrir, así como a un abrazo. Es normal si no te nace y quieras evitarlo, pero abrazar al otro en una situación así puede desactivarlo y ayudar. Reafirmale que el TLP no lo define Recibir el diagnóstico de una enfermedad, ya sea física o mental, no es fácil y una de las tareas de la persona que vive con ella es entender que no es todo ese conjunto de síntomas y señalamientos que muchas veces recibe. Esto le permitirá sentir menor culpabilidad y sobre llevar la condición. No dejarlo solo Durante una crisis la persona con TLP puede recurrir a las autolesiones, las bebidas alcohólicas, el uso de drogas, incluso a intentos de suicidios. Por eso es importante no dejarlos solos y esconder los elementos que pueden inducirlos a hacerse daño como cuchillos, pastas, entre otras. También se recomienda recordarles de las veces que han superado situaciones similares y que la crisis no dura para siempre. No sobreproteger Validar las emociones y tolerar las dificultades de personalidad es muy diferente a hacerlo dependiente de ti. En ese sentido, permite que la persona mantenga sus rutinas, autonomía y responsabilidades frente a sus tareas diarias.