¿Quién se queda con los niños en un divorcio?

En nuestra práctica diaria, podemos apreciar que muy pocas veces existen problemas por la Tenencia de los hijos menores de edad dentro de los procesos de Divorcio por Mutuo Consentimiento; ya que en un 98% los mismos cónyuges o progenitores han decidido que los hijos menores de edad se queden con la progenitora, es decir que los niños queden bajo el cuidado, protección y TENENCIA de su señora madre. En nuestro Estudio Jurídico han existido casos en donde los progenitores han decidido que los menores de edad se queden con el padre por múltiples razones, tales como mejor situación económica, existencia de una nueva relación en donde el niño o los niños no se adaptan a la presencia de la nueva pareja de la madre, razones laborales que impiden a la madre mantener un contacto diario o cotidiano con el menor, lo cual impide que el niño se encuentre bajo un escenario adecuado para su normal desarrollo. Donde existe una situación de mayor conflicto es en los Divorcios Contenciosos, donde muchas veces el padre tiene la intención de quedarse con los hijos menores de edad. Ya en la práctica, para que el Juez que por sorteo le toque conocer este proceso de Divorcio Contencioso, tendrá que valorar las pruebas que previamente el demandante haya incorporado, para que se justifique la necesidad de alejar o separar de su madre al niño o niña concebido dentro del matrimonio. Los jueces al apreciar que existe violencia o maltrato físico, psicológico y/o verbal, un escenario social y familiar en donde el juez considere que la desarrollo integral, social, educativo no es favorable para su normal crecimiento, o que su permanencia en dicho escenario corre peligro un integridad física, podrían decidir conceder la Tenencia a favor del otro progenitor siempre mantenerlo en un mejor escenario. Recordemos que adicionalmente los hijos menores a la edad de 12 años tienen la capacidad de discernir con qué progenitor quedarse y el Juez tienen la obligación de aceptar dicha decisión, siempre que no afecte su normal desarrollo y que las condiciones sean las apropiadas para su crecimiento.

Los hijos menores de edad no deciden puramente sino que, en caso de conflicto entre los progenitores, será un juez quien determine cuál es la mejor opción de custodia para ellos. A la vista de las circunstancias de la familia y de la relación entre todos los integrantes de la misma, se establecerá una custodia individual o una custodia compartida. La opinión de los menores sí se tiene en cuenta. Según la Declaración de los Derechos Del Niño, los menores tienen derecho a ser oídos especialmente en las resoluciones que les afecten. La edad es un factor importante en este sentido. Lógicamente, si un chico de 15 años manifiesta que desea estar el mismo tiempo con su padre y con su madre, tendrá mayor peso que si lo expresa un menor de 7 años. La autonomía del chico de 15 años supondrá que él irá cumpliendo con el régimen de visitas o custodia teniendo en cuenta su propio criterio.